Actualmente en España la ley no sanciona la maternidad subrogada, pero si declara nulo cualquier contrato de gestación por sustitución. Por tanto, el alquiler de un vientre no es legal pero tampoco ilegal.
Sin embargo, cada día más países en el mundo aprueban la maternidad subrogada. Naciones como Estados Unidos, Grecia, Ucrania, entre otros permiten el alquiler de un vientre para que muchos logren realizar el sueño de ser padres.
Si estás interesado en este modo de gestación, aquí encontrarás información valiosa que te puede ayudar a aclarar muchas dudas sobre este tema.
¿Qué significa alquilar el vientre?
Significa que una mujer lleva en su vientre el hijo de otra pareja o persona. La embarazada solo sirve de huésped para la correcta gestación de un infante deseado por otras personas que por motivos médicos no pueden procrear de la manera tradicional.
¿Cómo se realiza un contrato de alquiler de vientre?
El contrato de alquiler depende de las regulaciones de ley propias de cada país donde esta actividad es considerada legal.
Requisitos que deben cumplir al alquilar un vientre sustituto
Estar en edad de procreación, contar con una buena salud y demostrar su fertilidad. La mujer que alquila su vientre debe dar fe de que cuenta con la mayoría de edad y que goza de un excelente estado de salud para la gestación correcta de un infante.
Partos anteriores
Aunque no es un requisito obligatorio, preferiblemente, la mujer que decide alquilar su vientre no debería tener partos recientes o solo un parto previo a la gestación subrogada.
No ser adicta a las drogas
Las mujeres que desean servir de vientre de alquiler deben estar en capacidad de demostrar mediante análisis toxicológicos que a lo largo de su vida no han consumido ninguna sustancia ilegal que pueda alterar la correcta formación del infante en proceso de gestación.
Pagos estipulados a la madre sustituta
Esto va a depender del acuerdo contractual al que lleguen las partes involucradas, siempre respetando las leyes – en esta materia – del país donde se realiza en proceso de maternidad subrogada.
Estos servicios no son económicos, y en general, en los países en los que está permitida la gestación subrogada el coste puede oscilar entre cincuenta y doscientos mil euros. Un precio por debajo de estos marcadores probablemente se trata del mercado negro e ilegal.